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~Kuchizuke~
We can love…love each other surely, stabbing into the nape of your neck
We’ll love…love each other more, seeming to go mad in our intense thirst
Close your eyes and give me a sinful kiss, your scent drives me mad
I wake up in the middle of the night and drink insanity and love dry
Come here into my arms, The darkness over there is bitter
It’ll turn eternal before long, The darkness over here is sweet ![]()
Estado:
Indescriptible
Música que escucho: Be Good (Emily Kinney)
Download: Sakura Trick (cap12)
“Para mi, Sunako es un símbolo del colapso. Todo eventualmente colapsa. Todo desaparece, pero ella lo enfrenta y lucha. Esa parte de Sunako me fascina, es hermosa.” — Tatsumi.
En este artículo les traigo un paquete cargado de horror y suspenso. Comienzo presentando la serie que esta temporada estará vistiendo mi blog, el nuevo layout es del anime “Shiki” (Demonio Cadáver) del autor Fuyumi Ono *Click aquí para ver el anterior diseño*. Desde hace mucho tiempo el mito del vampiro me ha resultado atractivo, sin embargo los autores que empleando a tal criatura (o derivados) en una historia lograron cautivarme han sido los menos. Diría que en mi ranking vampírico solamente considero a Trinity Blood y Hakuouki digna competencia. Y por supuesto, sin limitarla a la temática la exalto en comparación con muchísimas obras de géneros diversos como una de mis favoritas. Esta serie parte de una base muy tradicional, tenemos un pueblito que de pronto es atestado por la muerte, una supuesta epidemia que resulta desafiar la ciencia moderna al descubrirse como lo mítico hecho realidad, no se trata de un virus sino de ataques de cadáveres chupasangre. Las víctimas son drenadas hasta la muerte, y algunas de ellas logran reanimarse convirtiéndose en la especie depredadora: Son llamados “Shiki”, “Okiagari” o “Risen”. Se originan por la llegada de una misteriosa familia, los Kirishiki, a una mansión estilo europeo que se encuentra en las afueras de la aldea. De estos cimientos clásicos nace una serie muy rica en cuanto a desarrollo dramático, acción, y personajes que son sumamente interesantes.


Megumi Shimizu, el primer personaje que logró encantarme, es una señorita elegante y de carácter fuerte que sintiendo que desencaja en la vida de campo sueña con gozar del glamur de la gran ciudad. Es ese deseo de encontrar su más adecuado ambiente que la lleva a querer conocer a los residentes de la lujosa mansión que le causa admiración. Su amor no correspondido es un joven llamado Natsuno Yuuki. Guapa stalker pelirrosa exclamando por su Yuuki, a que les recuerda a Yuno de Mirai Nikki.

Mi amada OT3 (♥): Tatsumi, el fiel sirviente de los Kirishiki, es un hombre lobo jodidamente sexy con personalidad sádica y adorable. Sunako Kirishiki, la vampiresa loli de la familia, tan moe que hasta un santo mata por ella. Seishin Muroi, monje y novelista, es el escritor que Sunako admira y al conocerse en persona rápidamente se vuelven cercanos manteniendo pláticas existenciales muy profundas. El poderoso lazo que se entabla entre estos dos hombres y la Shiki que idolatran con pasión enamora.


Al final sólo deseaba que los Shiki gobernaran. Lógico, todos mis personajes queridos resultaron ser de este bando. Cazados como “monstruos”, pero seres con tanto sentimiento que como espectadora terminé encariñándome y apoyándolos a full. Los personajes con los que tuve momentos de identificación fueron Seishin y Megumi. El doctor, líder del plan de exterminio de los Okiagari, comenzó a desagradarme desde el momento en el que usó a su propia esposa como conejillo de indias y sin sufrir en el proceso. Es una historia deprimente, pero que al menos Sunako y Seishin sobrevivieran al caos me alegró. El anime cuenta con veintidós episodios y dos extras, en tres días me lo devoré y me resultó tan adictivo que les aseguro que hubiera sido más veloz de no ser por la espera de la descarga. El manga consta de nueve volúmenes, apenas terminé el anime me puse a ver diferencias, lo que necesitaba confirmar era si efectivamente Sunako sobrevivía y el capítulo final del manga eso lo deja muy claro.
“Este mundo es cruel, pero también muy hermoso.” — Mikasa Ackerman.
Otra grandiosa obra con la que me enganché recientemente, la cual aún se encuentra en proceso, es “Shingeki no Kyojin” (Ataque de los Titanes) del autor Hajime Isayama. Mi hermana había comenzado a leer el manga y me lo recomendó muchísimo, sin darme mayores spoilers fue tema recurrente durante días hasta que finalmente cedí a darle una oportunidad. Vi el anime con ella, la primera temporada que consta de veinticinco episodios, y me resultó tan genial que impaciente por ver como continuaba no tardé en ponerme al día con el manga.


En un futuro apocalíptico existen unos seres denominados “Titanes” que devoran humanos, y un grupo reducido de sobrevivientes se ve en la necesidad de protegerse dentro de una enorme área de terreno amurallado de 50 metros de altura, el triple de la altura de los gigantes más altos registrados hasta la fecha de su construcción. Un día un titán colosal de sesenta metros y uno acorazado de menor tamaño logran derribar parte de la muralla principal provocando una invasión, acontecimiento que impulsará al protagonista y amigos a tomar la decisión de entrenar para ser miembros de la legión dedicada a la investigación y exterminio de la enorme amenaza. Eren Jaeger, el protagonista, es clave para su team por la capacidad de convertirse en titán [fabulous-rock star]. Hay mucho por develar sobre el origen de los titanes, y en definitiva es ese halo misterioso que desprende constantemente esta pintoresca historia lo atrapante.


Shingeki no Kyojin cuenta con muchos personajes interesantes, destaco como mi nº1 a Mikasa Ackerman, la heroína dandere-badass cuyo objetivo es proteger a toda costa a su hermanastro-novio Eren Jaeger. Mis parejas favoritas son Eren x Mikasa, Ymir x Christa y Jean x Marco (♥)
“No puedes tener miedo. Luchas y lo combates. No debes rendirte, y entonces un día simplemente… cambias. Todos cambiamos.” — Carol Peletier.
Para cerrar no puedo dejar de hacer mención de “The Walking Dead“, cuya cuarta temporada el domingo pasado llegó a su fin. Después del caos en la prisión, los personajes se separan fortuitamente en varios grupos durante el escape y en el camino de búsqueda todos toman un rumbo fijo al encontrar carteles indicando un lugar publicitado como un santuario de salvación llamado “Terminus”, que resulta ser un peligro más.
Ahogar penas en budín de chocolate, ¡Carl es de los míos!… Escuché antes muchas veces preguntar por el trabajo y la familia antes del apocalipsis zombi, pero primera vez “¿Qué clase de videojugadora eras?” (por Eugene Porter, que por cierto sospecho que ser el científico con la respuesta de cómo inició todo el lio es mentira suya), ¿cómo es que a nadie se le había ocurrido antes preguntar algo tan esencial de nuestras vidas?… En fin, a continuación voy a destacar a mis dos episodios favoritos de la temporada, los número trece y catorce…
El episodio más adorable de la temporada me parece “Alone”, el desarrollo de la relación entre Daryl y Beth me ha encantado por su extrema ternura (♥). Capítulos anteriores ya venía mostrándose el compañerismo de este par, una cercanía y calidez en aumento, y aquí hicieron el click justo para enamorarme. Cabe destacar que muchas veces otros personajes preguntaron a Daryl sobre su pasado, y solamente Beth logró que se abriera descargando todo lo que sentía y revelando sobre lo vivido antes del desastre. Beth Greene es una muchachita que pese a todo aún se caracteriza por la esperanza y es muy sensible, su dulzura es capaz de sacar a la luz el lado lindo del rudo arquero. Es en este episodio se producen varios toques gentiles entre ambos, y él comienza a pensar que en la vida no todo es negativo. Emily Kinney tiene una voz preciosa que se aprovecha en la serie, me gusta especialmente el cover del tema “Be Good” de Waxahatchee de dicho capítulo. Hay una escena en la cual parece que están a punto de besarse, pero… ¡Malditos walkers cockblockers, mierda!”… Terminan separándose en la huida, la chica es levantada por un auto misterioso y Daryl queda devastado por la perdida. La temporada acaba sin revelar el paradero de la rubia, los espectadores tienen ideas diversas sobre el destino de este personaje, yo prefiero mantenerme positiva creyendo que está bien (;^;)… Aunque abandoné el comic tengo entendido que existe un sacerdote sin malas intenciones en la historia, y hay varios detalles que me hacen creer que es el hombre que se la llevó…


El episodio más espeluznante de la temporada me parece “The Grove”. Tenemos una primera toma muy bien lograda que enlaza la imagen de la calidez de un plácido hogar en contraposición con un tétrico juego. En la introducción se presenta la visión del interior de una cabaña, un lugar que dentro de un mundo terrorífico se luce como especialmente acogedor. Del enfoque de una cocina, el sonido de una pava con agua hirviendo se mezcla con las dulces risas de una niña cuya imagen podemos apreciar por la ventana. No está sola en el jardín, se ven dos siluetas jugando a la mancha bajo los árboles, y una de ellas por el letargo con que se mueve evidencia claramente que se trata de una caminante. Para terminar de perfilar la mórbida intro, agrego a la descripción que de fondo se escucha una canción de la década de los 30 de la banda The Ink Spots, “Maybe”. “El mundo entero está embrujado ahora”, como dice Tyreese. El afecto por los walkers de Lizzie se veía ya desde hace tiempo, sin embargo no imaginé que llegaría al extremo de matar a su hermana para volverla una caminante. Si bien se rompió mi expectativa de pequeña tierna y potencial badass heroica al estilo Michonne que tenía sobre ella, el desarrollo perverso del personaje resultó el ingrediente picante que la temporada necesitaba. Como episodio de terror este se gana broche de oro, para cuteness ya me dieron mucho amor de Beth.


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